El coche de los ricos y famosos cuenta con piel diseñada para gustarle a todos los sentidos, incluso al sonido.
Rolls-Royce afirma que su piel es “sin lugar a dudas, la mejor del mundo”, y después de descubrir cómo se crea, es difícil no estar de acuerdo.
En primer lugar, trabajan directamente con los productores para garantizar que los toros, cuyas pieles usan, hayan vivido en climas húmedos y templados, mientras pastan en una exuberante hierba llena de nutrientes y antioxidantes que aumentan la inmunidad.
Una vez que las pieles son curtidas, la piel se prueba para determinar si puede soportar temperaturas extremas. Se coloca en una cámara especial, se enfría a -10°C y luego se calienta a 100°C. Esto no sucede sólo una vez. Ocurre una vez cada 24 horas durante 10 días.
Cuando la piel es teñida, Rolls-Royce lleva a cabo un proceso en el que la piel se cura en pigmento para asegurarse de que penetre a través de la piel, no sólo en la capa superior. Esto significa que mantendrá su brillo en todos los tonos de luz desde cualquier ángulo. También significa que la piel mantendrá su color a medida que madura y crea una pátina.
Ahora, acerca del elemento sonoro, no estábamos bromeando. A Rolls-Royce le preocupa tanto que la piel nunca rechine, que hacen girar a la piel dentro de un gran tambor durante 16 horas para lograr la textura más suave y suntuosa. Según la compañía, ello “asegura que estar sentado sea un acontecimiento sin interrupciones y pacífico, un detalle que con frecuencia toma a nuestros clientes por sorpresa”.
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