¿El ganado puede comenzar a paliar el problema del desperdicio de alimentos?

¿El ganado puede comenzar a paliar el problema del desperdicio de alimentos?

¿El ganado puede comenzar a paliar el problema del desperdicio de alimentos?

Sabiendo que casi el 40% de los alimentos producidos en el mundo terminan en el relleno sanitario, podemos ver que las vacas pueden lograr una manera de que se regresen a la cadena alimentaria

La mayoría de desperdicio de alimentos en los EU se elimina en el relleno sanitario, alrededor de 22 millones de toneladas. Así como las emisiones de CO2 por los desperdicios que se incurren en su producción, existen aquellos causados por su eliminación. Los alimentos desperdiciados tienen un doble impacto en el entorno.

Entonces, ¿cómo evitamos enviar alimentos al relleno sanitario? Hay varias maneras. Puede convertirse en biocombustible o fertilizante y, tal vez, de manera más eficiente, en alimento para animales.

El alimento para animales es posiblemente la manera más eficiente de convertir los alimentos desperdiciados en alimentos ricos en proteína con costos mínimos de infraestructura.

De acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), el 30% del alimento que se da al ganado en todo el mundo ya es un desperdicio de las cadenas de suministro de alimentos o subproductos del cultivo y procesamiento de alimentos.

Los Estados Unidos ya gestionan el envío del 10% excedente de alimentos de animales, y la mayoría de ellos viene de los fabricantes o tiendas de abarrotes. Pero ésto sigue dejando 14.7 millones de toneladas de alimentos desperdiciados que podrían ser usados de forma segura para alimentar animales. Y se siguen enviando al relleno sanitario que producen metano.

El WWF dice que la producción de todos los ingredientes que pasan de ser desperdicios a alimento tienen un impacto positivo en el uso de tierras, usando las opciones de alimentos que podrían ayudar a evitar la conversión adicional de terrenos para el cultivo de granos.

Estimaciones recientes establecen que la producción, transporte y descomposición de alimentos contribuyen con el 10% de los gases de invernadero mundiales. Todo sin razón alguna. Mientras más pronto se detenga o se redestine el desperdicio, será mejor para nosotros Y para el planeta.