Con la piel de Carl Friedrik, sabes lo que tienes. Cuando navegas por su página web, en la página de cada producto verás un botón de lo que es, en el mundo del menudeo en línea, un título desconocido es la procedencia.
Haz clic en él y encontrarás todos los detalles del origen de cada uno de sus diseños: la curtiduría en la que se produjo la piel y el método usado, la fábrica en la que se produjo el producto, de qué está hecho el forro y dónde se produjo, incluso los detalles de la cremallera.
Es ese tipo de atención al detalle lo que ha llevado a la empresa a la fama en tan poco tiempo. Fundada en Londres en 2013 por los hermanos suecos Niklas y Mattis Opperman, y bautizada con el nombre del padre de su madre, la marca nació cuando uno de ellos quería un regalo para el otro. Mattis quería comprarle a Niklas un maletín de cuero para su ordenador portátil que fuera de alta calidad. No pudo encontrar uno que pensara que tenía la relación calidad-precio adecuada, así que diseñó uno.
Todo ese proceso condujo a la creación de un negocio basado en un gran diseño, una buena relación calidad-precio y una total apertura en lo que respecta a la sostenibilidad. Ahora venden estuches y maletines para portátiles, maletas y bolsos de fin de semana, accesorios e incluso artículos de oficina.
Los diseños modernos, pero clásicos de la compañía, tienden a venir en tres colores clásicos: coñac, chocolate y negro, que, cuando buscas productos de piel de buen gusto, son prácticamente todos los tonos que necesitas. Una maleta de Carl Friedrik incluso ha aparecido en “Succession”, el drama televisivo sobre el magnate de los medios y su familia, cuyos estándares de sastrería son tan altos como baja su moral.
La calidad de las bolsas y accesorios de la empresa no siempre ha jugado a su favor. Cuando abastecieron a las tiendas, algunas de ellas descubrieron que podían aumentar tanto los precios que comenzaron a comprometer la visión de lujo asequible de los Opperman. Resolvieron ese problema llevando su negocio exclusivamente en línea. Ahora solo puedes comprarles directamente, lo que garantiza que el equilibrio calidad/precio se mantenga exactamente como lo desean. Esa ruta les está sirviendo bien: se lanzaron en Estados Unidos a principios de este año.
Toda la piel que usan, Vachetta de plena flor, proviene de una curtiduría familiar en Florencia, Italia. Es de curtido vegetal, usando taninos naturales que se encuentran en la corteza, hojas y raíces de los árboles.
Carl Friedrik es una empresa que pone el ejemplo cuando se trata de la filosofía de “compre bien, compre una vez”. Ofrece una garantía de por vida que incluye reparaciones o reemplazo por daños funcionales en todos los productos. Eso significa que reemplazarán todas las costuras, metalistería, cremalleras y asas de forma gratuita, para siempre.
Ahora bien, esa es la señal de una empresa con plena fe en sus propios productos.