No es casualidad que la mezclilla y la piel se hayan convertido en básicos de armario.
Ambos tienen vínculos con vaqueros, punks y supermodelos: los materiales de trabajo duro han crecido juntos a lo largo de la historia para convertirse en el uniforme característico de una variedad de subculturas en cada década.
Y la combinación sigue estando muy presente en los atuendos informales para dar una estética fresca y elegante.
¿El más simple de los looks? Un par de jeans y una chamarra de piel. Pero no te dejes engañar pensando que la combinación es una maravilla de un solo vistazo. Amplía tus horizontes sartoriales con una camisa vaquera metida dentro de unos pantalones de piel o una chamarra vaquera sobre un vestido de piel para mostrar realmente tu habilidad con el estilo.
Hay una razón por la que estas dos telas de trabajo hayan estado a la vanguardia de la moda y todo es gracias a sus inicios prácticos. El hombre primitivo usaba los cueros de los animales que cazaba para protegerse de los elementos. Desde entonces, la piel ha sido un material vital y muy querido a lo largo de la historia.
Mezclilla y cuero
La mezclilla, aunque se unió a la fiesta de la moda un poco más tarde en el tiempo, no ha flaqueado en las apuestas de estilo y los jeans siguen siendo los más vendidos en la actualidad. Sus raíces pertenecen a los mineros de oro estadounidenses de mediados de 1800 que necesitaban ropa que fuera fuerte y resistente.
El empresario Levi Strauss y el sastre Jacob Davis acudieron al rescate y el dúo patentó pantalones de mezclilla con remaches reforzados en los lugares donde a menudo se rompían, como las esquinas de los bolsillos y la base de la bragueta de botones.
De estos humildes comienzos nacieron los vaqueros tal y como los conocemos, y los Levi’s siguen siendo los más icónicos de todos.
El clásico dúo de piel y mezclilla se generalizó en la década de 1950 cuando estrellas de cine de Hollywood, como Marlon Brando y James Dean, lucieron sus chamarras de motociclista con pantalones de mezclilla arremangados.
Los íconos rebeldes crearon miles de imitadores que querían combinar su ropa de mezclilla con piel.
De la contracultura a la moda mainstream
Y esto ciertamente no fue una fase. En parte gracias a la prolongada vida útil de los materiales, el aspecto simple de los años cincuenta no ha demostrado ninguna señal querer desaparecer.
Adoptado por varias contraculturas a lo largo de los años, aunque las formas pueden haberse modificado, la columna vertebral del aspecto sigue siendo igual de popular ahora.
Se han dado grandes avances para hacer que los procesos de fabricación sean aún más ecológicos.
Estamos seguros de que conoces los aspectos sostenibles de la piel auténtica como subproducto de la industria cárnica y sus procesos naturales de curtido; a pesar de ser un producto natural y sostenible, la mezclilla ha estado en el extremo receptor de los detractores de la industria de la moda durante décadas.
La mezclilla es muy popular y está hecha de tintes de algodón e índigo. El algodón ha sido un cultivo comercial increíblemente importante en África, India y América Latina. Un legado de prácticas insostenibles de producción de pequeños agricultores llevó a críticas sobre el uso del agua en la producción de algodón y el uso insostenible de productos químicos, la exaltación de los sintéticos y la aceleración de la moda rápida. Incluso hoy en día, algunos defensores, como Fashion Revolution, afirman que se necesitan hasta 9500 litros de agua para hacer un solo par de jeans, lo que implica que deberíamos usar poliéster.
Aplaudimos las prácticas de producción sostenible y el uso responsable de productos químicos para que dejemos un legado de un mejor medio ambiente a nuestros hijos. Afortunadamente, algunas marcas están haciendo movimientos importantes en revisar estos procesos. Las etiquetas apoyan el algodón producido de forma sostenible y la fabricación amigable con el planeta.
Mientras se celebra la apariencia natural, busca estos elementos sostenibles y elige piel real para un atuendo más hermoso, duradero y amigable con el medio ambiente.
Y recuerda que, al igual que un buen vino, tanto la mezclilla como la piel se ven mejor con la edad, así que guárdalos en tu armario o revéndelos para evitar que terminen en el basurero.
Echa un vistazo a estas ideas de atuendos que te garantizamos que conservarás durante mucho tiempo.
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