El cuidado de los artículos de piel: la mejor guía

La mejor guía para el cuidado de los artículos de piel

El cuidado de los artículos de piel: la mejor guía

¿Cómo cuido mis artículos de piel? 

Mantener la piel en condiciones óptimas implica algunas reglas de oro que vale la pena tener en cuenta. Si sigue estas instrucciones, podrá proteger este material de cualquier daño y permitir que envejezca de forma natural. La mayoría de la gente cree que el cuero mejora con la edad, y la realidad es que, a medida que el material va mostrando signos de madurez, el producto adquiere un carácter y un encanto particulares.

Cuando del cuidado de la piel y el cuero se trata, siempre es importante recordar:

 

Secar el cuero mojado lo antes posible 

Sí, la mayoría de las pieles son resistentes al agua, pero si quiere mantener su integridad intacta, seque el material lo antes posible después de haberlo expuesto al agua. Si el exterior está seco, déjelo en un lugar seguro y deje que el aire haga lo suyo.

 

Acondicionar la piel que se ha resecado

Por otro lado, si tiene algún artículo de cuero que ha empezado a secarse demasiado, no tenga miedo de tratarlo como si fuera su propia piel. Aplique un acondicionador no graso a la superficie y frótelo suavemente en el material, utilizando un trapo seco para limpiar el exceso.

 

Si se ensucia, límpielo 

Lávese las manos antes de tocar la piel (ya que este material absorbe fácilmente la suciedad y los aceites) y limpie las manchas de suciedad con un trapo ligeramente húmedo. En caso de que tenga alguna mancha que el agua no pueda eliminar, existen muchos limpiadores de piel especializados en el mercado. Procure no tallar demasiado; basta con aplicar presión ligeramente.

 

Guarde su artículo de piel en un lugar fresco y oscuro

Las reglas para guardar los artículos de piel y cuero son las mismas que las de los alimentos no perecederos: manténgalo en un lugar fresco y seco, alejado de la luz solar directa. Si es posible, expóngalo al aire natural de vez en cuando. Esto ayudará a evitar la acumulación de polvo, residuos y moho, y a conservar el aspecto natural del material.

Estas son las reglas básicas, y si las sigue, su artículo de piel le durará toda la vida.

 

Foto por Stil en Unsplash